Un año más. 25-N.
Una fecha para recordarnos que el machismo es un cáncer social. Y no. No hacen falta demasiados datos, análisis o titulares, para darse cuenta.
La violencia hacia las mujeres se huele, se percibe; a veces más discreta, a ratos descarada, pero siempre presente a pesar de que muchos lo quieran negar.
Hay violencia en cada esquina, a plena luz del día y en los callejones más oscuros. Hay violencia en ese miedo, que nos impulsa a mirar hacia atrás al caminar.
Violencia en forma de putas, haciendo guardia en pleno siglo XXI, vendiéndose como carne al mejor postor, bajo una profesión que aún muchos defienden como una necesidad social.
Violencia en la prensa y en la publicidad. Violencia en el porno. Una industria pensada por y para hombres, y a su vez manual de uso para adolescentes curiosos, que crecerán con una falsa e insana visión de la sexualidad.
Violencia q no ves. Violencia que quizás hueles, que puede que sufras, pero que a ratos es mentira, “porque nadie te cree”, “porque es tu culpa”. por ir así vestida. Por esas fotos que cuelgas. Por dedicarte a provocar al hombre. Un hombre que sigue ocultando al animal, amedrentado por la carne, que le provoca desenfreno y le hace perder el control.
violencia en las calles. Violencia en los trabajos. violencia también en las casas. Madres, amigas, hermanas, suegras y cuñadas, que apoyan este machismo; que actúan defendiendo y alabando la sumisión, la discreción y el papel secundario de la mujer en su entorno.
Que se callan ante los clichés. Que ríen las bromas machistas. Que siguen permitiendo que sea el hombre el que “ayuda” en casa. El que nunca barre y no sabe vestir a los niños, porque ese no es su papel. Que siguen perpetuando el machismo y nos condenan a sus cadenas sin piedad.
Es violencia callar. Es violencia no posicionarse. Es violencia no condenar al padre que llama “nenaza” a su hijo porque los hombres no lloran. Porque ese padre perpetuará ese cáncer. Y la mujer que silenciosamente lo permite, es la mayor cómplice de todo este mal.
Violencia… con países que aprueban matrimonios a cualquier edad. Ablación. privación del deseo. lapidación a la mujer adultera. culturas inhumanas. mujeres sometidas en nombre de un Dios, que también es hombre…
Una violencia universal, instaurada con potencia. arraigada en cada poro de lo llamado femenino. de lo sagrado. de lo que da vida. de lo que debería ser intocable y no lo es…
Es cómplice el que la niega y la supone. El que la infravalora. Todo aquel que sigue defendiendo que no la ve, es tan burdo y ruin como el que pega, el que insulta, y el que mata sin un porqué.
Hoy es el día de todos aquellos que sí la vemos.
De todos aquellos que la condenamos.
De los que, a pesar de habitar en la sociedad de la hipocresía, la mentira y la desigualdad, no perdemos la esperanza de que cada pequeño acto es un paso hacia el respeto y la dignidad.
De que quedarse callados, es la forma más cobarde de fomentar esta injusticia social.
No seas cómplice… actúa.
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#revolucionfeminista